Puede sonar como
una broma, pero el sueco famoso Ice Hotel tiene un mandato para instalar
alarmas de incendios como medida de seguridad conforme a las normas nacionales
de construcción. El hotel situado en el extremo norte de Suecia, a unos 17
kilómetros de Kiruna, ha sido la creación de experiencias fantásticas de
invierno para sus huéspedes desde que abrió hace 24 años. Pero nunca ha habido
un incendio.
A pesar de las
temperaturas bajo cero y el hecho de que sus paredes, mobiliario, accesorios e
incluso gafas están hechas enteramente de hielo y nieve compactada, el hotel
tendrá que incorporar detectores de humo como medida de precaución requerido
por funcionarios suecos.
El hotel se
compone de aproximadamente 1.000 toneladas de hielo que se derrite cada año de
distancia, y la organización tiene que declararse en permisos de construcción
cada vez que reconstruir. El portavoz del hotel dijo que, aunque el edificio
está hecho de hielo, objetos como almohadas, sacos de dormir y las pieles de
renos pueden prenderse fuego-una respuesta diplomática a las curiosas
solicitudes de las autoridades.
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